Soldados franceses entreteniendo los ocios de la campaña dedicándose á la la pesca en las orillas del Marne. Mundo Gráfico (1915) |
Hace 9 años fue el inicio de la Gran Guerra, la I Guerra Mundial. Para conmemorar su centenario en el Centro Conde Duque se hizo una exposición de fotografías con el título La Gran Guerra. Una visión desde España. Este fue uno de los episodios más tristes de la humanidad, una guerra que asolaría Europa y se trasladó a las colonias de los países beligerantes, propagando el conflicto más allá de suelo europeo. Apenas si tengo imágenes de la exposición pero conservo el tríptico que se publicó. En los últimos años me ha llamado la atención el buen número de asociaciones francesas que recuerdan esa guerra, como si se tratara del afianzamiento del sentimiento nacional, el ensalzamiento de sus héroes anónimos, los combatientes, sus monumentos y sus publicaciones.
AGMM F.00318. SECTION FOTOGRAPHIQUE DE L'ARMÉE Ruinas del interior del Ayuntamiento de Arrás (Pas-de-Calais, Francia) |
España no participó en esta guerra pero tuvo su protagonismo en la sombra. No tengo muchas noticias al respecto, ni certezas, España se ofreció al bando aliado -La Triple Entente formada por Francia, Reino Unido y Rusia-. Al inicio de la guerra (1914) entre otros países europeos se habían quedado al margen, quizá porque no tenían intereses que defender, España o como Italia que se mantenía indecisa. Desde Londres, se dispuso que España fuese proveedor de los aliados: acero, cemento, alimentos etc. y sólo entraría en el conflicto si lo hacía Italia a favor de los alemanes. Italia finalmente entró en contienda en 1915 con la intención de recuperar territorios italianos en poder de Austria, haciéndolo del lado de los aliados de la Entente, lo que propicio que España se mantuviese neutral.
AGMM: F.00869. BuF A. Soldados alemanes y franceses se ayudan mutuamente en el camino de regreso, entre el Aisne y el Marne, julio 1918 |
En el tríptico de la exposición podemos leer: "En la Gaceta del 7 de agosto de 1914 el gobierno de S.M. Alfonso XIII declaraba la neutralidad. Sensible a las necesidades de los combatientes y de sus familias, el ejército español colabora en labores humanitarias con la Oficina Pro-cautivos, creada por el Rey para encontrar a los desaparecidos en el frente, vigilar los campos de prisioneros y repatriar a los heridos graves."
AGMM F.047663 Ernest Brooks Curación de un prisionero alemán en Abbeville, Somme (Francia). 22 junio 1917 |
Al concluir la guerra (1918) España había llevado a cabo su cometido, como país neutral no tenía nada que reclamar y volvió a la situación en que se encontraba al inicio de la contienda. El país había pasado cinco años proveyendo de recursos a los países de la Entente, sin haber aumentado la producción, sino que ésta se había derivado al exterior detrayéndola del consumo interno. Al concluir la guerra no obtuvo compensación alguna, sin embargo sufrió un grave problema derivado del fin de la guerra: los países vencedores ya no tenían necesidad del suministro español y hubo de enfrentarse al proteccionismo de estos países que tenían la necesidad de revitalizar su economía: su agricultura y su industria.
La neutralidad de España provocó dentro del país desequilibrios sociales importantes producto de una economía especulativa provocada por el alza de precios y escasez de productos básicos como la harina, el pan y el aceite. Los ricos eran cada vez más ricos y los pobres más pobres, situación que provocó no pocos estallidos sociales. Interesante es el artículo que publica Nuevo Mundo del 3 de octubre de 1919: "Por nuestra parte, señalamos el hecho de que la guerra que ha enriquecido á muchas gentes, que ha abarrotado de oro los sótanos del Banco y llevado las cuentas corrientes á cifras increíbles, no ha creado para España una economía nueva (...) Frente a esta realidad los actuales ministros revolucionarios no tienen un solo arresto que subvierta las condiciones del trabajo en España con alguna mayor eficacia que la que puede producir la jornada de 8 horas o la reforma electoral ...".
1914
Mundo Gráfico. (11-11-1914). TRISTEZAS DE LA GUERRA. Cadáveres de una aldeana belga y de un hijo suyo, entre las ruinas de su hogar, destruido por la artillería, cerca de Dinant. Fot. Hugelmann |
1916
Mundo Gráfico. (13-12-1916) LOS GRANDES DESASTRES DE LA GUERRA. Desolado aspecto que presenta el bosque de Delville, en el frente Occidental, después de la ofensiva del Somme. Fot. Hugelmann. |
El 13 de diciembre de 1916 Mundo Gráfico publica un artículo titulado Psicología de la guerra que no deja de sorprender por las cifras de combatientes que proporciona, en un tono más cercano a las cuentas del Gran Capitán y a la frivolidad que a la realidad de un conflicto que duraba ya dos años y medio: "Psicología de la guerra. La unidad de acción. Los que tomando en cuenta solamente la superioridad numérica y económica predijeron el aniquilamiento inmediato de los imperios centrales y siguen creyendo en su derrota, están apurando la copa de las sorpresas desagradables.
El empuje heroico de los ejércitos de Francia y Rusia, al que se unió el de las excelentes, aunque reducidas tropas británicas y el de los pequeños efectivos disponibles en Bélgica, Servia y Montenegro, no fué bastante para vencer á un enemigo que en todas partes lograba reunir elementos para la resistencia.
No varió el cuadro, de un modo sensible, la entrada de Italia en la campaña; y ahora vemos que la ayuda de los rumanos, con tantos afanes buscada, tampoco inclina la balanza de los sucesos, como era lógico esperar, por haber llegado a destiempo.
Un recuento de los hombres disponibles en ambos bandos beligerantes nos demuestra que las ocho naciones que combaten en Europa contra Alemana, Austria, Bulgaria y Turquía -no englobamos Portugal y ni el Japón-, duplican con exceso la fuerzas que las cuatro últimas han podido movilizar, aun aceptando las cifras que más las favorecen.
En opinión de von Bernhardi, y citamos un tratadista alemán para no ser sospechosos, el máximo esfuerzo de un país puede llegar á disponer en pie de guerra la décima parte de su población total. Según eso, Alemania dispone de seis millones de soldados; Austria de cinco; Turquía, de dos, y Bulgaria de 500.000; ó sea trece millones y medio de combatientes.
El otro grupo, Rusia alcanza una potencialidad militar de 17 millones; Francia de cuatro; Inglaterra puede llegar a cinco, sin contar los 367 millones de habitantes de sus colonias; Italia pasa de tres; Bélgica y Rumania disponen de 700.000 y Servia de un cuarto de millón, lo que suman unos 30 millones haciendo uso de iguales módulos para la apreciación.
Ya sabemos que el imperio moscovita no ha llegado, no con mucho á la cantidad mencionada, por sus deficiencias orgánicas, estando casi anulados los efectivos belgas y servios; pero, en cambio, la Gran Bretaña y Francia han dispuesto de numerosos contingentes coloniales que compensan esas reducciones.
Si á esto se une el dominio del mar y la facultad de traer recursos del mundo entero la superioridad resulta abrumadora, no pudiendo ponerse en duda el triunfo de la "Décuple Entente".
A continuación el articulo detalla los múltiples errores cometidos por la "Entente" en los diferentes frentes que vienen a demostrar la desunión entre los aliados mientras que, pese a la inferioridad numérica "sus adversarios operan siempre con una armonía perfecta".
Para esta entrada he consultado la siguiente documentación:
Mundo Gràfico,17 marzo 1915
Mundo Gràfico,13 diciembre 1916
Nuevo Mundo, 03 octubre 1919
Tríptico de la exposición La Gran Guerra. Una visión desde España, 2014
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