sábado, 10 de marzo de 2018

Estación de servicio "Petróleos Porto Pi"


La Estación de servicio "Petróleos Porto Pi", obra de Casto Fernández-Shaw Iturralde (1929), -la actual Estación de servicio Gesa, en la calle Alberto Aguilera 18 de Madrid-, es una de las primeras construcciones racionalistas de España. El viajero que pare en la estación de Metro de San Bernardo, puede leer en el andén información sobre esta emblemática construcción. La gasolinera está "considerada como un ejemplo singular de la arquitectura moderna de la segunda mitad de los años veinte, y es para muchos autores una de las tres construcciones que marcan la entrada a la contemporaneidad de la arquitectura española, junto con el Rincón de Goya, de Fernando García Mercadal, en Zaragoza, y la Casa del Marqués de Villoria, de Rafael Bergamín Gutiérrez, en Madrid. Esta gasolinera se ha convertido en un manifiesto de la arquitectura racionalista por la singular expresión de su estructura, si bien fue demolida en el año 1977 y reconstruida por Carlos Loren Butragueño".

Gasolinera Porto-Pí en 1929
Antes de salir al exterior y ver la gasolinera, conviene terminar de leer el texto completo para tener una idea más clara y la importancia de la construcción: "Los escasos elementos que integran su silueta son muestra de lo que su autor denominaba "arquitectura sin estilo", con la torre-altavoz del proyecto original, que contiene una escalera de caracol, evocadora de la construcción naval, y la ligera cubierta de hormigón nervada de la marquesina, símbolo dinámico de la aeronáutica, que está sustentada por dos pilares. En realidad constituye un edificio futurista influenciado por la idea del funcionalismo."


Al parecer propio Fernández-Shaw se lamentaba de haber pasado a la historia de la arquitectura española por este pequeño edificio, -había llegado a proyectar y construir presas-  aunque sin duda es su obra más conocida por ser, precisamente, una de las primeras manifestaciones de la arquitectura moderna en España. Dentro de la máxima de Mies van de Rohe "menos es más", Fernández Shaw consigue con su obra la máxima expresión de belleza con unos mínimos elementos.

Gasolinera Gesa en 1958
Pero es el propio Fernández-Shaw en un artículo publicado en la revista Arquitectura quien nos da los pormenores de la obra: "La disposición de la planta permite el aprovisionamiento simultáneo de seis coches situados en dos calles de tres metros cada una dejando en el centro un andén de un metro para situar los aparatos de aprovisionamiento", que complementa con un pabellón destinado a "Exposición de Automóviles y venta de accesorios, servicio de teléfono, aseo  w.c."
"Para protección de los coches que se estén aprovisionando se ha construido una marquesina de hormigón armado, de veintitrés metros de longitud, por siete de ancho, y una segunda marquesina paralela a la anterior, y en un plano más elevado para proteger el tragaluz construido para dar luz al escaparate".
"Por último -concluye- en uno de los extremos del pabellón, se sitúa una torre de hormigón armado de trece metros y medio de altura, destinada a llamar la atención del público y donde se ha colocado el nombre de la Sociedad propietaria". En esta torre se instalará un altavoz que servirá para emisión de conciertos, programas de radio y promociones.

El profesor Ángel Urrutia , en su Arquitectura Española del siglo XX, destaca la horizontalidad y verticalidad de la construcción, así como la utilización del hormigón visto que dotaba a la obra de un dinamismo futurista que se desarrolla en la torre -similar a las de ventilación de los barcos-, la visera -similar a las alas de un aeroplano- así como el resto de elementos como los surtidores y altavoces que prescinden de cualquier complemento superfluo.

En el artículo Fernández Shaw enumera los pormenores de las piezas y elementos que utilizará en la construcción: marquesina principal, pilares, segunda marquesina, la torre, la cimentación y resistencia al viento de la torre, e indica finalmente que se construyó "en dos meses"

Desmontando la torre en 1977
Como se puede leer en el cartel del andén de Metro, la gasolinera debió quedar obsoleta y sus propietarios, pertenecía entonces a la compañía Gesa, decidieron demolerla en 1977; demolición parcial, según Areán, Vaquero y Casariego en su libro sobre los edificios perdido en Madrid. La torre desmontada, aunque luego se volviera a reconstruir por orden de Patrimonio en 1996 a semejanza del original. Señalan estos autores que, toda vez que el uso al que estaba destinado el edificio se mantenía, seguía siendo una gasolinera, esta actuación era un ejemplo de la lamentable práctica que se llevaba a cabo en aquella época de renovación urbana. Sobre el mismo aspecto, el profesor Urrutia se lamenta de forma muy crítica con el derribo y la posterior reconstrucción a cargo de los propietarios.


En la actualidad existe una placa que recuerda los autores de la reconstrucción -el arquitecto Carlos Loren Butragueño; el aparejador Ángel Jiménez Rodríguez y ejecutada por la constructora Copeinsa- pero no se hace mención a la autoría de Casto Fernández Shaw. En una breve conversación a pie de la gasolinera, me comentaron que ésta representaba la proa de un barco y que la torre era la chimenea. Comento esta pequeña anécdota no como crítica sino como la desinformación lleva a una interpretación errónea de esta obra singular, por lo que conviene recordar la explicación que da el propio Fernández-Shaw de su obra:

"Estilo.- No tiene ningún estilo. Ha surgido una silueta de los elementos que integran la construcción. La superposición de los planos de las marquesinas recuerdan a la alas de un biplano. La torre recuerda a los tubos de ventilación de un barco. La estructura de hormigón armado se ha conservado en toda su pureza, salpicándose tan solo con cemento y arena de mármol. Unos faroles de línea sencilla animan las marquesinas; los aparatos que suministran la gasolina, el petróleo, los aceites, el agua, el aire a presión, los extintores de incendio, 'decoran' la instalación . Los automóviles, al altavoz, las luces le darán vida".

Gasolinera sin fecha.
He de agradecer a la compañía Gesa que me haya facilitado las fotografías de época, excepto las de más abajo que son de la revista Arquitectura. Junto con esa inestimable información gráfica, para esta entrada he consultado los siguientes publicaciones:

Arquitectura, nº 100, agosto 1927
Arquitectura Española Siglo XXUrrutia, Ángel, Cátedra, Madrid, 2003
Madrid. Arquitecturas perdidas 1927-1986, Arean, A., Vaquero, J.A., Casariego, J., Ed. Pronaos, Madrid, 1995.
Cartel informativo Estación San Bernardo, Metro Madrid

Proyecto. Revista Arquitectura 1927 
Gasolinera. Revista Arquitectura 1927

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